Algunas personas con discapacidades de desarrollo sufren enfermedades mentales. Por lo tanto, es posible tener una discapacidad de desarrollo y una enfermedad mental al mismo tiempo. Esto puede hacer que se sienta triste o angustiado y que sea necesario hospitalizarlo si se lastima a usted mismo, si lastima a otra persona o si rompe distintos objetos. Además, tal vez deba ser hospitalizado si amenaza con lastimarse o con lastimar a otras personas. A continuación, se enumeran algunas enfermedades mentales:
- Depresión (períodos prolongados o extremos de tristeza).
- Trastorno bipolar o maníaco depresivo, episodios alternados de “picos” de manía y de “bajas” de depresión.
- Trastorno de ansiedad (miedo excesivo o ansiedad relacionados con determinados objetos o situaciones).
- Trastorno esquizofrénico (alucinaciones, ilusiones y trastornos del pensamiento).
- Trastorno obsesivo compulsivo (patrón de conductas o de pensamientos obsesivos o repetitivos).
Hospitalización
Si sufre una enfermedad mental, puede sentirse afligido o tener la necesidad de exteriorizar sus sentimientos. Esto puede ser un indicio de que está atravesando una crisis. Además, es posible que intente lastimarse a usted mismo, que lastime a otras personas o que rompa distintos objetos. Quizás deba ser hospitalizado.
- Deberá ser hospitalizado en los siguientes casos:
- Se lastima a usted mismo.
- Lastima a otras personas.
- Rompe o destruye distintos objetos.
- Amenaza con lastimarse.
- Amenaza con lastimar a otras personas.
Si está atravesando una crisis, es posible que deba ser hospitalizado durante algunas horas o días. Según la magnitud de la crisis, un juez decidirá si necesita un tratamiento adicional. Tal vez deba hablar con un consultor terapéutico o terapeuta, o bien, quizás deba tomar nuevas medicaciones. Trabajará con su equipo para decidir cuánto tiempo se quedará en el hospital. El equipo estará formado por personal médico, su coordinador de servicios del centro regional y la persona que lo cuida. Su familia y amigos también pueden ayudarlo. En el equipo, debatirán sobre las maneras que pueden ayudarlo a controlar sus sentimientos y a reducir el estrés.
Deberá comunicar cuando comienza a sentirse angustiado.
Existen distintas maneras para percibir la angustia. He aquí algunos indicios:
- Preocuparse sobre su rutina diaria como las comidas, la vestimenta u otra actividad cotidiana.
- Dormir demasiado o muy poco.
- Sentirse irritable o inquieto.
- Dificultad para pensar o concentrarse.
- Enojarse con frecuencia.
- Tener miedo o sentirse amenazado por aspectos cotidianos.
- Sentirse triste o ansioso, sin ninguna razón.
- Escuchar voces (en su cabeza) que le dicen lo que debe hacer.
- Hablar consigo mismo, en lugar de hacerlo con otras personas.
Existen distintas maneras para controlar su conducta si considera que se siente angustiado.
Es posible tomar medidas para evitar la hospitalización.
Puede hablar con su psicoterapeuta o consultor terapéutico, ya que es una persona capacitada para asesorarlo sobre sus problemas, dudas o preocupaciones. Un consultor puede ser:
- Un psiquiatra.
- Un psicólogo.
- Un trabajador social.
- Un terapeuta.
- Su pastor, cura o rabino.
Dialogar con su consultor terapéutico lo ayudará cuando se sienta triste o angustiado y le permitirá saber cómo actuar en esos momentos. Si no cuenta con un consultor terapéutico, la persona que lo cuida o el coordinador de servicios del centro regional pueden ayudarlo a concertar una cita.
Dialogue con otras personas:
- Llame a un miembro de la familia o a un amigo.
- Hable con la persona que lo cuida.
- Llame a su médico.
En ocasiones, necesita pasar tiempo con otras personas. Compartir un rato con amigos o con la familia puede ayudarlo a distenderse. También puede realizar actividades que le gusten. Esto lo hará feliz y le permitirá pensar en las cosas que lo hacen sonreír.
Realice actividades que disfrute:
- Haga ejercicio. Salga a caminar. Ande en bicicleta. Participe en clases de baile. Se sentirá mejor al hacer ejercicio.
- Escuche música. Cante una canción.
- Reduzca el estrés. Dedíquese tiempo a usted mismo.
- Haga ejercicios de relajación. Piense en las cosas que le gustan y que disfruta.
- Realice actividades voluntarias. Ayudar a otra persona puede hacerlo sentir bien y le permite olvidar sus preocupaciones.
- Intente realizar una actividad nueva.
- Coma alimentos sanos.
Cómo pedir ayuda
Es importante pedir ayuda cuando se siente angustiado. Pedir ayuda a tiempo puede evitar la hospitalización.
Para pedir ayuda, puede realizar lo siguiente:
- Llame a un amigo o a un miembro de la familia.
- Llame a la persona que lo cuida.
- Llame a su coordinador de servicios del centro regional.
- Solicite a su coordinador de servicios del centro regional el número de teléfono del Servicio de intervención en crisis del centro regional.
- La Red Nacional para la Prevención del Suicidio es gratuita y está disponible las 24 horas para cualquier persona. Llame si está pensando en lastimarse. Su llamada será redireccionada al centro de crisis más cercano a su domicilio. El número de teléfono es 1-800-273-TALK (8255).
- Puede llamar a su Servicio de Intervención en Crisis de salud mental local. Es un servicio disponible las 24 horas. Haga clic aquí para visualizar una lista de números telefónicos.
- Puede llamar a la Red de Atención de Salud Mental para obtener más información sobre grupos locales. Haga clic aquí para encontrar recursos en California.